Dallas, Estados Unidos – Dos detenidos murieron y uno resultó herido el miércoles en un ataque contra un centro de detención de migrantes en Texas, sur de Estados Unidos, perpetrado por un francotirador que luego se suicidó.
Un francotirador abrió fuego desde una azotea cercana contra una oficina local del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en la ciudad de Dallas. El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) detalló que el tirador disparó indiscriminadamente, impactando también una camioneta en la terminal de salida, donde las víctimas fueron baleadas.
Tres detenidos recibieron disparos. Dos fallecieron y el otro se encuentra en estado crítico. El tirador fue encontrado muerto con una herida de arma de fuego autoinfligida, según el DHS.
El ataque ocurrió poco antes de las 07:00 horas locales. Tras el tiroteo, el director del FBI, Kash Patel, confirmó que este fue un acto de violencia orientado ideológicamente, indicando que uno de los casquillos recuperados tenía grabada la frase "ANTI ICE".
El vicepresidente JD Vance expresó su preocupación sobre el aumento de ataques hacia las fuerzas del orden, especialmente contra el ICE. "Rezo por todos los heridos en este ataque y por sus familias", afirmó.
Este trágico suceso resalta la tensión en Estados Unidos respecto a la política de inmigración, donde se han intensificado las detenciones y deportaciones, generando críticas de activistas de derechos humanos y opositores políticos.
El agente especial del FBI, Joe Rothrock, anunció que el tiroteo se investiga como un "acto de violencia dirigida", mientras que la Secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, subrayó que "estos horrendos asesinatos deben servir como una llamada de atención a la extrema izquierda: su discurso sobre el ICE tiene consecuencias".
Este incidente se suma a una serie de ataques recientes contra instalaciones de ICE, resaltando las tensiones en la política migratoria del país.
