Nueve fallecidos por temporal en Kentucky y Georgia, Estados Unidos
Los servicios de emergencia han realizado más de un millar de rescates en las últimas 24 horas en respuesta al "enorme" impacto de la tormenta

Kayakista navega por las aguas de la inundación del sábado 15 de enero.

Al menos nueve personas han perdido la vida debido a una fuerte tormenta que azotó durante la noche los estados de Kentucky y Georgia en Estados Unidos, provocando inundaciones masivas que han anegado carreteras y viviendas.

De acuerdo con el gobernador de Kentucky, Andy Beshear, ocho de los fallecidos se encuentran en su estado, mientras que la novena víctima corresponde al estado de Georgia, según reportes de la CNN.

Los servicios de emergencia han realizado más de un millar de rescates en las últimas 24 horas como respuesta al imponente impacto de la tormenta, resaltó Beshear. En Kentucky, hace solo dos años, 43 personas murieron en catastróficas inundaciones.

Necesitamos que los kentuckianos permanezcan en alerta. Más de 300 carreteras están cortadas. El impacto en el estado es histórico," publicó Beshear en sus redes sociales. La tormenta ha generado deslizamientos de barro en el este y nuevos desbordamientos en el oeste, tachando la situación de peligrosa.

El gobernador declaró el estado de emergencia el viernes y agradeció al presidente Donald Trump por declarar el desastre federal, lo que facilitará la llegada de fondos federales a las áreas afectadas.

En Red Boiling Springs, Tennessee, una residencia con 52 personas mayores tuvo que ser evacuada, según los Servicios Médicos del Condado de Macon. Múltiples agencias han estado involucradas en la operación para asegurar el bienestar de los evacuados.

La tormenta también ha tenido un impacto severo en la infraestructura eléctrica. Más de 265,000 abonados en Georgia están sin suministro eléctrico, seguidos de otros 183,000 en Alabama, 64,000 en Mississippi y 20,000 en Louisiana. En Kentucky, Virginia y Tennessee, aproximadamente 60,000 clientes enfrentan la misma situación.

La comunidad se ve afectada por este fenómeno natural, que ha dejado una huella significativa en las vidas de los residentes y el entorno. La colaboración de las autoridades y la solidaridad entre ciudadanos son cruciales para sobrellevar esta difícil circunstancia.