Harvey Weinstein, el magnate del cine actualmente encarcelado, ha presentado una demanda en la que acusa a su hermano, Bob Weinstein, de engañarlo para garantizar un préstamo de 45 millones de dólares en 2016. Según la demanda, estos fondos fueron desviados para su uso personal mientras se preparaba el terreno para su caída empresarial.
Weinstein, de 72 años, instituyó las reclamaciones en un caso civil que ocurre en Nueva York y que involucra a un prestamista que lo acusaba de no pagar el préstamo. Su abogado, Imran Ansari, indicó que su cliente fue engañado por sus allegados, quienes pretendían utilizar el préstamo para salvar a The Weinstein Company, pero en realidad, desviaron millones de dólares para beneficio personal.
Harvey Weinstein, quien cofundó Miramax y fue una figura prominente de Hollywood, se enfrenta en este momento a un nuevo juicio por delitos sexuales tras la revocación de su condena en 2020. Este juicio está programado para finales de año.
La demanda alega que Bob Weinstein y otros ejecutivos involucrados en la compañía conspiraron para llevar a Harvey a una situación financiera precaria con el fin de ganar control sobre la empresa que se declaró en quiebra en 2018 en medio del escándalo de conducta sexual inapropiada.
Los detalles de la acusación son graves. Se afirma que Bob Weinstein retiró al menos 6 millones de dólares de las cuentas de la empresa bajo falsas pretensiones, mientras que el ex director de operaciones, David Glasser, también está mencionado en la demanda, acusándose de recibir bonificaciones excesivas y mal manejar los fondos de la compañía.
La búsqueda de justicia por parte de Harvey Weinstein incluye la solicitud de protección contra cualquier responsabilidad financiera por el préstamo, además de daños punitivos por fraude y mala conducta financiera.
El escándalo que rodea a Weinstein comenzó en 2017 con el movimiento #MeToo, al que se le atribuye haber revelado los relatos de su conducta sexual inapropiada. Actualmente enfrenta múltiples cargos por agresiones sexuales y continúa manteniendo que cualquier interacción fue consensuada.
Con esta demanda, Harvey Weinstein no solo busca reparaciones financieras, sino también recuperar parte de su reputación en un ámbito que ha sido severamente manchado por las alegaciones de abuso.
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Harvey Weinstein, el magnate del cine actualmente encarcelado, ha presentado una demanda en la que acusa a su hermano, Bob Weinstein, de engañarlo para garantizar un préstamo de 45 millones de dólares en 2016. Según la demanda, estos fondos fueron desviados para su uso personal mientras se preparaba el terreno para su caída empresarial.
Weinstein, de 72 años, instituyó las reclamaciones en un caso civil que ocurre en Nueva York y que involucra a un prestamista que lo acusaba de no pagar el préstamo. Su abogado, Imran Ansari, indicó que su cliente fue engañado por sus allegados, quienes pretendían utilizar el préstamo para salvar a The Weinstein Company, pero en realidad, desviaron millones de dólares para beneficio personal.
Harvey Weinstein, quien cofundó Miramax y fue una figura prominente de Hollywood, se enfrenta en este momento a un nuevo juicio por delitos sexuales tras la revocación de su condena en 2020. Este juicio está programado para finales de año.
La demanda alega que Bob Weinstein y otros ejecutivos involucrados en la compañía conspiraron para llevar a Harvey a una situación financiera precaria con el fin de ganar control sobre la empresa que se declaró en quiebra en 2018 en medio del escándalo de conducta sexual inapropiada.
Los detalles de la acusación son graves. Se afirma que Bob Weinstein retiró al menos 6 millones de dólares de las cuentas de la empresa bajo falsas pretensiones, mientras que el ex director de operaciones, David Glasser, también está mencionado en la demanda, acusándose de recibir bonificaciones excesivas y mal manejar los fondos de la compañía.
La búsqueda de justicia por parte de Harvey Weinstein incluye la solicitud de protección contra cualquier responsabilidad financiera por el préstamo, además de daños punitivos por fraude y mala conducta financiera.
El escándalo que rodea a Weinstein comenzó en 2017 con el movimiento #MeToo, al que se le atribuye haber revelado los relatos de su conducta sexual inapropiada. Actualmente enfrenta múltiples cargos por agresiones sexuales y continúa manteniendo que cualquier interacción fue consensuada.
Con esta demanda, Harvey Weinstein no solo busca reparaciones financieras, sino también recuperar parte de su reputación en un ámbito que ha sido severamente manchado por las alegaciones de abuso.