La fuerza armada venezolana comenzó a entrenar a civiles en Venezuela, siguiendo las órdenes de Nicolás Maduro de preparar una defensa total ante Estados Unidos, país que mantiene un despliegue naval en el Mar Caribe bajo el argumento de combatir el narcotráfico.
Durante el fin de semana, amas de casa, empleados públicos, trabajadores y militantes del partido gobernante empuñaron armas en ejercicios de entrenamiento por parte de militares. Estos entrenamientos se llevaron a cabo en algunas comunidades de Caracas, en respuesta a la orden de Maduro de preparar a la población ante lo que él considera una amenaza militar de EEUU.
Los participantes aprendieron a utilizar fusiles de guerra, a apuntar y disparar, así como a moverse en situaciones de combate. Adicionalmente, se brindaron charlas sobre actividades relacionadas con la atención de heridos y medicina de urgencia en el contexto bélico.
En este contexto, algunos manifestaron su disposición a defender su patria. “Estamos aquí dispuestos a morir si es necesario por nuestra patria”, declaró un militar. Una señora comentó: “Si viene para acá, que nos consigan preparados”, mientras que otra participante afirmó que era el momento de “empezar ya a tomar las armas”.
Estos entrenamientos recordaron a los ejercicios similares ordenados por Maduro en agosto de 2017, cuando el presidente estadounidense Donald Trump también fue señalado de amenazar con invadir la nación caribeña.
Mientras tanto, Maduro rechazó los señalamientos de narcotráfico y envió una carta a Donald Trump en la que lo invita a dialogar para “preservar la paz”. En la misiva, el mandatario venezolano afirmó que los rumores sobre sus vínculos con el narcotráfico son “absolutamente falsos”, cuestionando la justificación de un posible conflicto armado en América Latina.
Este desarrollo plantea preguntas sobre la situación política y militar en la región, además de cómo afectará las relaciones bilaterales entre Venezuela y Estados Unidos en el futuro cercano.